Un día tuve un sueño: soñé que todo, en nuestro mundo conocido, se paralizaba.
Soñé que el suave y lento quehacer de ese reloj de arena incrustado en nuestras cabezas se congelaba y detenía su rutina por un momento.
Soné que se abría e iluminaba el cielo dejando a la tierra en oscura parálisis de movimiento.
Soñé para ver un único camino: mi destino.
Y al despertar un sendero me alargó su mano.
Petons!!!
Marc.
2 Comments:
Hola Marc,
Desde Quebec t'estic començant a fer propaganda. La gent al.lucina amb les teves fotos i... JO TAMBÉ!!! QUINA PASSADA!!!!
Moltes felicitats pel teu treball i espero que arribi tan lluny com es mereix
Petons canadencs
Miriam
Hola Miriam,
Moltíssimes gràcies per tot!!!
Petons blanencs
Marc.
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